Consejos para Parrilladas con Miel Por el chef Michell Sánchez

Consejos para Parrilladas con Miel

Por el chef Michell Sánchez, Experto en Parrilladas y

Dueño / Chef Ejecutivo del restaunrate Latin House Grill

 

Para lograr que tus parrilladas sean perfectas; Michell Sánchez, el reconocido experto en parrilladas y personalidad de la televisión, comparte algunos de sus secretos para asar a la parrilla usando el endulzante principal y versátil de la naturaleza: la miel.

 

Preparación:

 

Manejo de la miel y adobos a base de miel: Para que la miel fluya sin dificultad, pon el recipiente de miel bajo el agua caliente manteniéndolo boca abajo.  Esto se aplica también a los adobos preparados con miel, ya que tienden a ser espesos.

 

Marina en una bolsa: Mezcla tu adobo a base de miel directamente en una bolsa de plástico para alimentos. Agrega la carne y el adobo a la bolsa y agítala ligeramente para mezclar. Cuando los ingredientes se estén marinando en la bolsa de plástico, asegúrate de mover la carne de manera que todos los lados queden marinados en forma uniforme. Luego, refrigera.

 

Controla el tiempo: Los pescados y las verduras absorben los sabores rápidamente, se deben dejar marinar entre 30 y 40 minutos; el pollo puede marinarse por media hora o durante toda una noche y las carnes de res o de cerdo generalmente requieren, como mínimo, de una a dos horas para realzar los sabores. Al marinar alimentos, mantenlos siempre refrigerados o con hielo si estás al aire libre.  

 

Prepara la carne: Antes de colocarlas en la parrilla, las porciones de carne deben estar frescas, pero no frías.  Esto reduce el tiempo de cocción y ayuda a que los alimentos se cocinen de manera uniforme.  No perfores innecesariamente la carne porque perderá los jugos.



 

Para asar:

 

Organízate: Coloca todos los ingredientes y materiales junto al asador: carnes, adobo de miel, glaseado de miel, etc. Además, debes tener a la mano los utensilios que necesitarás, como las pinzas para dar vuelta a los alimentos.

 

Prepara el asador: Comienza siempre con el asador limpio. Enciende el carbón o el gas 30 minutos antes de cocinar; precalienta a una temperatura de entre 350 y 400 grados. Empezar a asar con el asador caliente ayuda a evitar que los adobos y las salsas a base de miel se adhieran a él. Esto también permite que la limpieza posterior del asador sea más fácil. Por último, pincelar el asador con aceite antes de colocar los alimentos también ayuda a evitar que se adhieran y hace que la carne quede con las marcas tal como se sirve en los restaurantes.

 

Deja reposar los alimentos: Casi todos los alimentos que salen de la parrilla tendrán un mejor sabor si los dejas reposar sobre la tabla de cortar durante algunos minutos antes de servir. Esto permite que los jugos, que se desplazaron hacia el centro de la carne o el pollo asado por acción del calor, vuelvan a la superficie y le den a tu carne un sabor más jugoso.

 

Cocina con seguridad: Por último pero muy importante, recuerda usar utensilios con mango largo, nunca uses gasolina para encender la parrilla y no uses delantales con tiras largas que puedan prenderse fuego.